CÓMO BUSCAR TRABAJO SIN EXPERIENCIA

La búsqueda laboral se ha vuelto muy competitiva. Hay quienes no encuentran trabajo por no tener experiencia. Otros no lo encuentran por estar sobrecalificados. Y otros buscan nuevas experiencias en rubros donde no habían experimentado.
Para todo hay una solución. Y la falta de experiencia puede ser una objeción, pero nunca un problema. Porque todos tenemos experiencia.
Por qué se piden tantos conocimientos
Hay ofertas laborales interminables. Alguien se tomó el trabajo de escribir semejante carta. ¡Y mira todo lo que piden!;¿quién reúne tantos requisitos? Uno tendería a pensar.
La verdad es que, muchas veces, no se necesita reunir todas las habilidades y títulos que solicitan. Lo que necesitás cumplir son los requisitos para hacer el trabajo. Y si en la entrevista laboral demostrás actitud de servicio, ganas de aprender, responsabilidad y simpatía, inclinarás la balanza a tu favor.
Sí, leíste bien, simpatía. Porque las habilidades de relacionamiento son altamente valoradas en el mundo de hoy. Todos podemos aprender, pero nadie querrá trabajar con un gruñón, un maleducado, grosero, soberbio o que solo se ocupa de su propio beneficio.
Aventúrate en el saber
Si ves que un conocimiento aparece reiteradamente en las ofertas laborales y no lo tenés, ponete en campaña para obtenerlo. Hay cursos por muy bajo costo en diversas plataformas. Incluso gratis, que solo te cobran por el certificado.
Y ni hablemos de YouTube, que posee información valiosa. Aventurate en el saber. Tené la disciplina de tomar notas de los materiales que estudiás. El interés por aprender es tan valorado como el conocimiento en sí. Y la única forma de demostrarlo es aprendiendo.
Toda experiencia cuenta
Han llegado a mi consulta buscadores de empleo que manifiestan la dificultad para conseguir trabajo debido a la falta de experiencia. Pero cuando entramos a indagar en su historia, resultaba que sí la tenían, solo que no la valoraban como tal.
Habían participado en proyectos, habían tenido contratos temporales, habían realizado pasantías. Todo eso es experiencia y suma mucho en las primeras etapas de tu vida laboral. Y también cuando hacés un cambio de rumbo.
Esto significa que, si te piden dos años de experiencia, no están diciendo que debés haber trabajado ocho horas durante 730 días. Están pidiendo «años» de experiencia.
Y esas experiencias pueden haber sido a tiempo parcial, pueden haber sido a cambio de algún beneficio no monetario e incluso totalmente voluntarias. Repito: no están pidiendo «horas» de experiencia ni tampoco el recibo de cobro.
Pero si sos muy nuevo en el mundo laboral y no tuviste aún la oportunidad de integrar un equipo de trabajo, valorá toda microexperiencia que hayas tenido. Desde liderar un grupo de compañeros de estudio en la realización de un proyecto, la investigación para la entrega de un trabajo o la participación en alguna actividad extracurricular.
Creéme que los reclutadores querrán ver eso en tu currículum y que se lo cuentes en la entrevista laboral. Son datos que ayudan a valorarte como candidato.
Qué puedo hacer si no tengo experiencia laboral
Carlos había egresado de la escuela de gastronomía con su diploma de cocinero, pero debido a la pandemia no tuvo la oportunidad de realizar pasantías en restaurantes, ya que los pocos que permanecieron abiertos no arriesgaban su seguridad sanitaria con personal externo.
Tuvo entonces que indagar en lo realizado durante el período de estudio y rescató la experiencia de haber colaborado preparando alimentos en un club de su comunidad, en eventos a beneficio. Expresó en el currículum la cantidad de personas alcanzadas y las habilidades puestas en práctica.
A ello le sumó el haber colaborado en la atención al cliente en una empresa de la familia.
Todos esos detalles demostraron su capacidad para trabajar colaborativamente, ajustarse a procedimientos, aptitud para el servicio y trato con personas.
La información sirvió para ilustrar lo realizado y demostrar interés en resultados. Así se presentó a su primer trabajo formal, donde se desempeña exitosamente al día de hoy.
¿Cómo se consigue experiencia?
Si aún así no tenés nada que ofrecer, es hora de ponerse creativos. Ana Clara soñaba con dar clases de inglés, pero no se había atrevido a enseñar por su cuenta. Comenzó a publicar microlecciones de 280 caracteres en Twitter, a las que luego agregó imágenes elaboradas con Canva.
Con el tiempo, su cuenta se transformó en un portfolio que evidenció el enorme interés por la lengua y aptitud para elaborar contenido educativo, lo que fue valorado positivamente en una pequeña academia donde le dieron un primer grupo para enseñar. No era mucho, pero ya estaba en camino.
No te enfoques en lo que te hace falta
Como ves, buscarle el lado sencillo a las cosas y utilizar los recursos disponibles puede ser de gran ayuda para iniciar tu camino profesional. No tenés que esperar a que te den la primera oportunidad: creala vos y presentala como un aporte de valor que podés amplificar en la organización que te contrate.
Nadie está queriendo ponerte trabas para que ingreses al mercado. Al contrario, el mercado está esperando que tu talento se manifieste para aprovecharlo de la mejor manera. Se valorará tu interés. Demostralo con hechos y dale el valor que corresponde.
Tenés lo que se necesita. Aprendé a contar tu historia.
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