“No fueron 30.000 desaparecidos” y “fue una guerra”: negacionismo de Milei marcó debate

El debate acerca de las cifras de víctimas de la última
dictadura militar argentina (1976-1983) y las de las organizaciones armadas de
izquierdas que operaron en el país durante los 70 centraron este domingo el
bloque de derechos humanos del primer debate preelectoral.
La candidata de la coalición Juntos por el Cambio (centroderecha), la
ministra de Seguridad durante el Gobierno de Mauricio Macri (2015-2019),
Patricia Bullrich, pidió al resto de los candidatos que dejen de “acusarla
falsamente” de tener las manos manchadas de sangre por su pertenencia a
Montoneros (izquierda peronista).
“Cuando no impera la ley llegan las tragedias. Aprendí que la única forma es
en paz y convivencia. Elegí el camino del Estado de derecho”, aseguró Bullrich,
que no negó haber pertenecido a los órganos juveniles del grupo y se comparó
con el expresidente sudafricano, Nelson Mandela, y el uruguayo, José Mujica.
Además, la centroderechista pidió que se reconozca a las víctimas de la
dictadura, pero también a los que causaron “las organizaciones terroristas”.
Refiriéndose a la situación actual del país, Bullrich pidió el fin de los
piquetes que provocan “una convivencia imposible” de los argentinos.
Por su parte, el candidato ultraderechista, Javier Milei, negó durante el
debate la cifra de 30.000 desaparecidos durante la dictadura.
“Nosotros valoramos la visión de memoria, verdad y justicia. Empecemos por
la verdad. No hubo 30.000 desparecidos, fueron 8.753”, aseguró el libertario,
en línea con su compañera de fórmula, la abogada Victoria Villarruel, cercana
al ámbito militar.
Esas 30.000 personas corresponden a la cifra oficial y aproximada que dan
las organizaciones de derechos humanos y la mayoría de los partidos argentinos.
El candidato de extrema derecha también arremetió contra asociaciones como
las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo. “No estamos de acuerdo con los curros de
los derechos humanos”, aquellos que, según Milei, “usaron la ideología para
ganar plata”.
No es la primera vez que Milei
deja ver su negacionismo sobre los crímenes de la dictadura argentina.
El candidato argentino se rodea de dirigentes que relativizan el terror del
Estado y prometen escarmiento, lo que lleva también a una radicalización de
oponentes como Macri. El ultra de La Libertad Avanza obtuvo en las elecciones
PASO (primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias) más del 30% de los
apoyos, lo que podría significar un giro de Argentina a la extrema derecha.
Milei, que protagonizó varios cruces con el resto de los candidatos, tildó
de “aberrantes” las acusaciones vertidas sobre los integrantes de su formación,
que han sido calificados de “fachos, fascistas y nazis”.
No obstante, el candidato de La Libertad Avanza restó importancia al bloque
del debate destinado a los derechos humanos y la convivencia democrática, y
animó al resto de los aspirantes a “seguir discutiendo de Historia” mientras él
gestiona el país.
Réplicas
Las posiciones de Milei y Bullrich fueron duramente contestadas por la candidata
del Frente de Izquierda y Trabajadores, la también abogada Myriam Bregman, que
consideró las afirmaciones “negacionistas”.
Bregman se refirió también a la palabra “libertad”, usada habitualmente por
Milei para movilizar a sus votantes, y dijo que el economista “justifica los
secuestros y los campos de concentración de la dictadura”.
La candidata, que fue abogada del superviviente a la dictadura Jorge Julio
López, desparecido en 2006 tras declarar judicialmente contra el expolicía
Miguel Etchecolatz, también tuvo tiempo para referirse a las tensiones vividas
en los últimos meses en la provincia noroccidental de Jujuy; al polémico caso
de la muerte del activista Santiago Maldonado durante el gobierno de Macri,
cuando Bullrich era ministra de Seguridad, o las elevadas tasas de feminicidios
en el país sudamericano.
Por su parte, el candidato oficialista y actual ministro de Economía, Sergio
Massa, aprovechó la coyuntura para reivindicar las cuatro décadas de la
democracia argentina, que se conmemoran este 2023, y se mostró dispuesto a “conversar
con todos los sectores” después de las elecciones.
“El 10 de diciembre voy a convocar un gobierno de unidad nacional. Nadie
puede sorprender porque vengan sindicalistas, empresarios, trabajadores o
comerciantes, liberales, radicales o miembros del PRO (el partido liderado por
Bullrich). Porque, en definitiva, el desafío que tenemos es construir una
política de estado”, dijo Massa.
En el mismo sentido se pronunció el otro candidato vinculado al peronismo,
el gobernador en funciones de la provincia de Córdoba, Juan Schiaretti, que
pidió que los derechos humanos sean “patrimonio de todos los argentinos y no
sea utilizado por un solo partido o por un solo gobierno”.
EFE
Montevideo Portal