Se filmó en Uruguay, tiene a Natalia Oreiro en uno de sus papeles más duros y acaba de estrenar su temporada 2

Ayer se estrenó la segunda temporada de Iosi, el espía arrepentido en Prime Video. Basada en la novela de Horacio Lutzky y Miriam Lewin (Iosi, el espía arrepentido: la confesión del policía federal infiltrado en la comunidad judía, un título que adelanta todo), se convirtió en una de las ficciones más elogiadas de los últimos tiempos.

Filmada en parte en Uruguay, este entramado policial está narrado en dos tiempos (comienza en 1985, y la otra parte transcurre en 2007) y cuenta con un elenco de ambas orillas del Plata: están Natalia Oreiro, Marco Antonio Caponi, César Troncoso, Alejandro Awada y Gustavo Bassani.

En esta temporada se suman la argentina Mercedes Morán y a los israelíes Moran Rosenblatt e Itzik Cohen, conocidos por la serie de Netflix, Fauda.

La trama de esta serie, nominada a los premios Emmy como mejor drama y mejor actor (para Bassani), se centra en el policía José Pérez, y la complicada misión que le encomendaron realizar.

En la primera temporada se tuvo que hacer pasar por judío (ahora atiende como Iosi Péres) e infiltrarse varios años en la comunidad y en la embajada de Israel. Todo lo logra, desconociendo los planes reales de sus superiores.

En el cierre de la primera temporada, Iosi entiende que la información que recabó fue la que permitió el atentado a la embajada de Israel en Buenos Aires en 1992 y que, por eso, su vida corre peligro.

Sin mucha gente a quien pedir ayuda llega a Aaron (Daniel Kuszniecka), el jefe de seguridad de Saúl Menajem (Awada), el poderoso banquero sospechoso de ser parte de un entramado de tráfico de armas. Al seguridad, Iosi le confiesa que es un agente de inteligencia infiltrado, y pide que lo contacte con el Mossad.

En la segunda línea de tiempo, en 2007, Iosi lleva una vida solitaria en algún lugar de la costa, y tiene las pruebas de que Garrido fue el asesino de Abraham (Juan Leyrado), su padrastro. Gracias a las recomendaciones de Claudia (Oreiro), el espía se mantiene alejado de su pareja y su hijo Jonás.

Al igual que en la primera temporada, en estos nuevos capítulos se abordan algunos temas históricos de Argentina. Si antes fue el atentado a la embajada de Israel, ahora es la mutualista AMIA que fue en 1994), así como la explosión de la fábrica militar de Río Tercero y la venta de armas a Ecuador durante el conflicto con Perú en 1995.

“Iosi está prófugo, y empieza a trabajar para el Mossad como doble agente, espiando a los servicios locales”, comentó Bassani en una entrevista con La Nación. “Su misión es investigar el secreto mejor guardado del ejército argentino: el misil Cóndor. Además, está su relación con su hijo Jonás y con todas las mujeres con las que se fue relacionando. Y también con Saúl, a quien admira porque, a su manera, también es una especie de camaleón que siempre cae bien parado”.

Bassani define esta temporada como intensa. “Se ve más claro quién es José y quién Iosi, esa especie de hombre redimido que él quiere ser”, contó. “José quiere ser el mejor agente posible y realizar las dos misiones que tiene, y Iosi va a tratar de conectarse con su hijo e intentar enmendar un poco toda la destrucción que fue creando”.

Por su parte, Oreiro adelantó que Claudia, esa mujer misteriosa y seductora que es la jefa de Iosi y de Garrido (Caponi), y solo le responde a Castaño (Troncoso), ya no confía en nadie.

“Mi personaje y el de Garrido tienen mucho vínculo, más que en la primera temporada”, adelantó la uruguaya a La Nación. “De alguna manera somos un poco enemigos, porque ella siente que la está traicionando. Por eso, ella empieza a estar muy débil. Se siente desplazada, porque la información que le dan no es real. Siente que todo su trabajo sirvió para hacer algo de lo que ella no estaba al tanto. Y es algo con lo que no está de acuerdo”.

Igualmente Claudia es un personaje que sabe que tiene que seguir con su misión, porque es parte de la fuerza, aunque también comienza a entender que está siendo usada. Eso la hace quebrarse, algo que no puede permitirse una espía como ella.

“El gran miedo de Claudia es que se transparente algo de lo que siente. Y cuando eso pasa, se vuelve loca. Son personajes que quisieran no tener escrúpulos. Ella es mucho más estructurada: realmente creía en lo que estaba haciendo. Y cuando empieza a tambalear, es su fin, porque nadie puede salir de la organización”, comentó la actriz.

Si bien apareció en la primera temporada, Mercedes Morán se suma al elenco de esta nueva etapa. Interpreta a Mónica Raposo, quien fue una periodista de investigación y es la encargada de un refugio de animales. A ella, Iosi le hace llegar un casete en el que cuenta toda su historia en primera persona.

“Mónica va a ser la encargada de acompañar a Iosi en su decisión de hacer pública su historia para cambiar su estado”, comentó la reconocida actriz acerca de su personaje.

Así, con una buena recreación y elenco, y una historia atrapante se construye esta premiada serie que está de regreso.

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