El pedalista oriundo de la ciudad de Fraile Muerto, Samuel Morales, se ubicó en la segunda posición de la 4ta. etapa de Rutas de América, la que tuvo su arribo a la ciudad de Melo en el mediodía de este miércoles.
“Estamos en la conversación”, publicó con orgullo en redes sociales el municipio de Fraile Muerto, al destacar que Morales se subió al podio y que su clasificación le permite mejorar en la tabla general y contribuir en la performance de su equipo, el “Náutico de Bocas de Cufré”.
“En una edición más de Rutas de América, los niños de la escuelita de ciclismo del municipio de Fraile Muerto (liderada por Morales) fueron a recibirlo”, destaca la publicación que pone en alto y felicita al deportista de aquella ciudad de poco más de 3 mil habitantes, quien recibió mediante el abrazo de sus alumnos, el premio mayor.
LA ALEGRÍA Y EL ESFUERZO SE DAN LA MANO
“Estamos chochos de contentos”, señaló espontáneamente a Cerro Largo Portal el alcalde Gastón Nauar, quien destacó aspectos personales y profesionales del “profe”.
Mediante una fuente cercana al deportista pudimos saber, que su mamá tiene un carrito gastronómico en la Wenceslao Silveira y que cada persona que llega la felicita, al tiempo que su papá es quien acompaña en Rutas de América a un Samuel que con con los pies en la tierra se permite soñar en grande y a todo pedal.
El “orgullo del pago” tiene 24 años, es un agradecido del apoyo de su familia, de su ciudad y con pasión, responsabilidad y compromiso va logrando hacer crecer a la escuelita de ciclismo “Rayito de Luz”, cuyo nombre lo eligieron los propios alumnos. Comenzó con siete niños inscriptos, entre ellos un sobrino, y ahora son más de treinta.
Deportivamente Morales alcanzó grandes rendimientos y logros en competencias como la Vuelta Ciclista del Uruguay y Rutas de América, entre otras, y estuvo a punto de irse a España para competir en Europa, pero la pandemia enfrió la posibilidad y el viaje no salió.
UN TANTO QUE VALE POR DOS
Como suele pasar y más aún en el interior profundo del Uruguay, llevar adelante una carrera profesional no es fácil, por eso, la contratación como Entrenador realizada inteligentemente por el municipio de Fraile Muerto, le permite a Morales dedicarse al ciclismo y a su vez, el municipio y la comunidad se nutren de un recurso humano formado, que entrena, motiva y traslada a niños y adolescentes de su ciudad conocimientos que sigue adquiriendo no solo en la ruta.
“CON UN GRUPO DE NIÑOS TE REÍS TODOS LOS DÍAS”
Con el objetivo de sembrar valores e impactar en la vida de los niños, en una nota brindada hace un tiempo atrás a colegas de RODOTV, el líder de la escuelita de ciclismo de Fraile Muerto contó aspectos vinculados a su inspiradora historia.
Entre ellas, relató la anécdota de “Jorgito”, un niño que no tenía freno en su bici “y los otros (niños) le tenían miedo”, contó entre risas el deportista de elite con vocación social: