“Es todo muy desprolijo”, opinó el Dr. Mario Burgos en relación al caso de la Ministra de Vivienda

Utilizando su perfil de Facebook para analizar la situación que involucra a la Ministra de Vivienda, Cecilia Cairo, el Dr. Mario Burgos Pintos, escritor, ex político y abogado, brindó desde Cerro Largo su óptica al respecto:
Creo que el tema de la Ministro de Vivienda Cecilia Cairo, es una demostración más del poco respeto que le tiene la casta política a la ética y a la institucionalidad.
Yo no quiero sumarme al coro de los que analizan y valoran un hecho grave, ignorando el medio social y las características de la comunidad de la que formamos parte. En el Uruguay no existe una formación cultural que ponga como valor el cumplimiento de nuestras obligaciones tributarias. Yo no creo que haya muchos entre nosotros que se preocupe por el cumplimiento cabal de los tributos que nos gravan o que se generan como consecuencia de nuestra actividad. Tal vez porque la mayoría siente que difícilmente eso que estamos pagando vuelva a nosotros en bienes y servicios (que cada vez son peores), sino que van a servir para financiar un aparato burocrático, en el que los primeros favorecidos van a ser la casta política profesional, y aquellos que son acomodados por ella.
Por eso construir en negro, sin declarar las construcciones, ni pagar los aportes, ni sufrir el incremento del valor de la Contribución Inmobiliaria consecuencia de la valoración del inmueble, no son conductas particularmente condenadas socialmente.
Pero la cosa cambia cuando pasamos a ejercer un cargo público, y en especial, cuando es de alta exposición. En ese caso, como la mujer del César, no solo hay que ser sino también, parecer.
Porque cuando hay que empezar a dar tantas explicaciones sobre “irregularidades” que hemos cometido, la cosa comienza a complicarse.
Por supuesto que el no declarar ni regularizar las construcciones clandestinas, como hizo la Ministra Cairo, no constituye un delito. Pero es una irregularidad grave, que afecta severamente su investidura. Porque la probidad es una de las condiciones implícitas que requiere la designación de un Ministro por el Presidente de la República. Porque por mandato constitucional, el Ministro debe contar con respaldo parlamentario, y tiene entre sus obligaciones hacer cumplir la Constitución y las Leyes, Decretos y Resoluciones (artículo 181).
Pero además, porque cuando se comienzan a investigar estas irregularidades, nunca vienen solas. Ahora el Observador informa que la Ministra -que entre 2020 y 2025 fue Diputada- presenta tres deudas financieras por un monto total de US$ 14.758 más un castigo por atraso de US$ 3.040, según consta en la Central de Riesgos del Banco Central. Que en una de ellas figura como deudora irrecuperable de categoría 5. Se trata de un crédito ante el banco BBVA, por la que recibió el castigo por atraso de US$ 3.040.
Las otras dos corresponden a la categoría 3 –que engloba a los “deudores con capacidad de pago comprometida– y son ante ANDA y el Banco República.
Y aquí empieza a complicarse la cosa. Porque ¿cómo va a ser irrecuperable una deuda de U$S 14.758, cuya titular es propietaria de un inmueble valorado por ella misma en U$S 100.000? Bueno, porque quizá, tal vez, no incluyó dicho inmueble en el Balance presentado a las Instituciones Financieras. Tal vez, porque según ha dicho, ella construyó -al igual que sus hijos- en un terreno que era de su padre, por lo que ella no sería la titular. Pero entonces, ¿por qué lo incluyó en su Declaración Jurada de situación patrimonial que presentó ante la JUTEP?
En alguna de esas declaraciones juradas se dijo algo que no era cierto. Y que causó un perjuicio. Y de ser así, eso si es delito. Y grave.
Desde 2020 fue Diputada. Desde diciembre de 2024 el Presidente Orsi debió de haber analizado la posibilidad de designarla al frente del Ministerio de Vivienda. ¿No pudieron poner las cosas en claro, solucionar lo que hubiera que solucionar, regularizar lo que estuviera omiso, y ahorrarnos a todos este asunto tan feo, que viene a aparecer a 40 días de la asunción del nuevo gobierno?
Es todo muy desprolijo.