
A los 41 años, Caterine Carballo se despidió oficialmente de las canchas, luego de una trayectoria ejemplar que la convirtió en una de las grandes referentes del fútbol femenino de Cerro Largo.
Su historia con la pelota comenzó desde niña, en la canchita de La Querencia, en el barrio Ruiz de Melo. Pasó por distintos cuadros locales en los primeros años de formación de la liga femenina, hasta que en el año 2000 se incorporó a Arachanas, el club que marcaría su vida deportiva.
Con la camiseta del representativo melense disputó 10 finales nacionales y obtuvo 5 títulos de Campeona del Interior con la Organización del Fútbol del Interior (OFI), en las ediciones 2001, 2002, 2003, 2012 y 2020.
El pasado 28 de setiembre, en la final del Campeonato Nacional Femenino, jugó su último partido defendiendo los colores de Arachanas, cerrando así una carrera llena de logros, compromiso y pasión.


Más allá de los números, Carballo deja un legado que trasciende las estadísticas: su nombre es sinónimo de liderazgo, perseverancia y amor por el fútbol femenino, siendo inspiración para las nuevas jugadoras no sólo del club.
Su retiro marca el fin de una etapa, pero también el comienzo de un reconocimiento merecido para quien dedicó más de dos décadas a hacer historia dentro y fuera de la cancha.