Lacalle presenta este lunes el texto final de la reforma jubilatoria a líderes de la coalición

Con el convencimiento -dicho tantas veces- de que la reforma de la seguridad social no puede esperar ni siquiera un año más, pero que a la vez debe hacerse con el mayor consenso posible, el presidente Luis Lacalle Pou presentará hoy el texto final que el gobierno enviará al Parlamento, con el objetivo de que al menos obtenga una primera sanción del Senado antes de terminar el año.

El nuevo articulado -que recogió una cantidad importante de cambios a sugerencia de los socios del oficialismo- será entregado esta tarde a los líderes de los partidos de la coalición de gobierno, en una reunión que tendrá lugar en la Torre Ejecutiva, instancia final para terminar de definir el texto para ya hacerlo firmar por todo su gabinete en el Consejo de Ministros del próximo jueves. Porque ese día el Ejecutivo tendrá la última instancia antes de enviar el articulado a la cámara alta, en donde tendrá un tratamiento casi exprés, muy similar al que en su momento tuvo la Ley de Urgente Consideración (LUC), en una comisión especialmente abocada a ello (ver aparte).

“Me gustaría que sea sin ‘capaz’”, dijo este sábado el mandatario, al ser consultado justamente sobre si ya esta tarde daría a conocer la propuesta final, cuya redacción, cambios y articulación estuvo desde un comienzo a cargo del abogado Rodolfo Saldain. Es un articulado que incorporará “muchísimos puntos de los partidos de la coalición”, resaltó el presidente, que añadió que como resultado quedará una reforma “sostenible”, que además será “justa” y de “largo aliento”. Y será fruto de un trabajo, siempre liderado por Saldain, que fue intenso este fin de semana, pues se hicieron ajustes y precisiones hasta última hora del domingo.

Muchos de los cambios que se incluirán -que van desde modificar la distribución de los aportes para favorecer las jubilaciones medias, hasta contemplar a quienes ya tengan 30 años de trabajo al momento de regir la reforma y no obligarlos a jubilarse con 65 años sino con 63, entre varios otros- ya son conocidos por los partidos. Y hay, en términos generales y al menos hasta el momento, satisfacción en el oficialismo, aunque no sea del mismo grado en todos los socios.

Por lo pronto, y más allá de los otros planteos realizados, hay un cambio que, aunque aún no fue formalizado -el encuentro de hoy en ese sentido será clave- está arriba de la mesa y se lo entiende de probable aplicación. Lo que se analiza es la posibilidad de modificar la escala gradual de las primeras generaciones a retirarse con un aumento de la edad de jubilación, y que sea recién en 2040 los primeros en hacerlo a los 65 años -o sea, aquellos nacidos en 1975.

Es decir, habría modificaciones a lo propuesto en este tema en el texto original , que planteaba un período de transición que comienza con los nacidos en 1967 -quienes se podrían retirar en 2028 con 61 años-, y los de 1971, con 65 en 2036. Las generaciones del medio -las de 1968, 1969 y 1970- de acuerdo a la fórmula del Ejecutivo, iban sumando un año cada una hasta llegar a la edad tope de retiro, pero esto puede ser distinto para disminuir el impacto en los primeros afectados, reconocieron a El País fuentes del gobierno.

Como respaldo para esto, hay “proyecciones” hechas por Saldain para asegurar la sostenibilidad de los cambios en este sentido, como informó El Observador días atrás.

Los líderes de la coalición de gobierno se reunieron con el presidente en Suárez y Reyes para recibir el anteproyecto de reforma de la seguridad social. Foto: Juan Manuel Ramos.

La expectativa
Pese a que sepan, con más o menos detalle, lo que se encontrarán hoy en el encuentro con Lacalle, en los socios del oficialismo hay optimismo de que lo que ingresará al Senado es el proyecto de “una buena ley”, como dijo por ejemplo el secretario general del Partido Colorado, Julio María Sanguinetti.

En otros está la natural “expectativa” de ver si, efectivamente, los cambios propuestos estarán reflejados en el texto, como reconoció Daniel Peña, del Partido de la Gente.

También en diálogo con El País, Pablo Iturralde -presidente del directorio del Partido Nacional- espera que en la reunión ya se “redondee” la iniciativa para que el gobierno pueda ejercer “la responsabilidad de cumplir con su deber”.

Pablo Mieres, ministro de Trabajo y líder del Partido Independiente, en tanto, dijo este sábado que las propuestas de su colectivo “fueron incorporadas”, por lo que asistirá al encuentro con conformidad.

Argimón: “Apuntamos a que haya un tratamiento rápido”
La vicepresidenta de la República y presidenta de la Cámara de Senadores, Beatriz Argimón, lo tiene decidido: en la reunión de bancada de la coalición de gobierno de hoy lunes ya planteará a los socios la creación de una comisión especial específicamente dedicada al abordaje del proyecto de la reforma jubilatoria, algo que ya se analizaba desde hace semanas.

“La idea -dijo Argimón a El País- es que inmediatamente que llegue el proyecto podamos empezar a tratarlo”. La fecha en que el Parlamento tomará contacto con el articulado, si todo sale como lo tiene previsto el presidente Luis Lacalle Pou, es este viernes 21, luego de que el Consejo de Ministros firme la iniciativa.

“Esto tiene que tener un tratamiento medianamente rápido, para que, en lo posible, el proyecto se apruebe y sea enviado a la Cámara de Diputados antes de fin de año”, agregó la vicepresidenta.

Es el mismo camino que se siguió en 2020 con la Ley de Urgente Consideración (LUC). Y, como entonces, o tal vez incluso un poco más, los senadores del oficialismo tendrán este tema como de máxima prioridad. Esto, no obstante, no quita que el Senado igualmente tenga otros asuntos que exigen su abordaje, por eso también la necesidad de un ámbito legislativo específico para el tratamiento de la reforma. “No podemos trancar una comisión, como la de Constitución y Código” que tiene varios asuntos en trámite, dijo Argimón.

El apuro en armar la comisión especial también responde en que los partidos tienen que decidir en forma célere su integración.

Jubilaciones futuras en riesgo, insiste el presidente
En declaraciones a la prensa este sábado, el presidente Luis Lacalle Pou volvió a referirse a la necesidad impostergable de transformar el sistema jubilatorio. “Todos sabemos que si Uruguay no reforma la seguridad social nuestros hijos (y) nuestros nietos difícilmente se puedan jubilar”, dijo y agregó: “Con lo cual, todo el sistema político sabe que tiene que haber un cambio. Nosotros tomamos ese desafío”. El mandatario también destacó que la iniciativa tiene “muchas cosas positivas” y otras vinculadas al cambio en la “expectativa de vida” de la humanidad.

EL PAIS